El marcado carácter religioso, divino o iniciático que en todas las culturas y civilizaciones se ha atribuido a las sustancias que alteran la conciencia, también acompañó al vino desde su origen. Una vez se decide organizar sistemas de producción, se establecen una serie de reglas que inevitablemente hablan de los pueblos que las generan. Esas reglas determinan la ubicación, distribución de espacios, organización de tareas, recipientes, altares, rituales para la producción y el consumo etc. Y, al hacerlo, es como si mostrasen abiertamente y desnudas todas y cada una de sus intimidades como cultura
En la Sierra de San Cristóbal, el punto más elevado de El Puerto de Santa María, a unos 100 metros de altitud y bajo la dirección del Prof. Dr. Diego Ruiz Mata Catedrático de Prehistoria, se descubrió en 1991 que el conocido como yacimiento de Las Cumbres albergaba la que por ahora es la bodega completa más antigua del mundo. Está datada en el siglo III antes de nuestra era y comprende un complejo constructivo con una superficie de unos dos mil metros cuadrados.
El matiz de “completa” no es fútilo innecesario, muy al contrarioes el que eleva al lugar que corresponde a este descubrimiento arqueológico. Pone de manifiesto que esa bodega conserva todos los elementos propios que acompañaban a la elaboración de un productorevestido de divinidad y exclusivo, sólo al acceso de la élite política y religiosa.
Quienes iniciaron la producción del vino en ese lugar elevado y prominente, donde ubicaban lo sagrado, lo trajeron de sus tierras de medio oriente envuelto en su bagaje religioso, cultural y tecnológico. Podría considerar que el vino suponía el vértice en el que confluían todas las aristas de una sociedadpara encontrarse con su realidad superior.
Por eso, este hallazgo arqueológico supone un hito en el conocimiento no sólo de un producto, ahora cotidiano y accesibleantes revestido de lo más sutil y complejo de la cultura de origen. Gracias a él, es posible sumergirse en la historia de un pueblo a 2000 años de profundidad, y explorarlo por completo, a travésel primigenio océano del vino.