Situada en uno de los frentes de la Plaza de la Herrería, su construcción se remonta a mediados del S. XVIII. Es un edificio de una gran sobriedad, a pesar de lo cual existen determinados matices que le dan cierta presencia barroca.
El origen y función de esta antigua "cilla/pósito" era el servir de almacén de los productos agropecuarios o "Diezmos" que se pagaban al Cabildo Hispalense, propietario de este pósito y bajo cuya jurisdicción estaba, por entonces, El Puerto de Santa María.
Estos edificios de tipología semejante a los Pósitos Municipales tenían la misión de almacenar los productos obtenidos del pago del diezmo (una figura recaudatoria que se aplicaba en beneficio de la iglesia y consistía, en líneas generales en la entrega de la décima parte del producto agropecuario). Por lo general eran más complejos que los pósitos por cuanto abarcaban más funciones. En estos casos hacía también las veces de bodega. Solían tener dos plantas y patio en torno al cual se establecían los graneros, desplazándose hacia un lateral la bodega y la almazara.
El edificio en cuestión, conserva su estructura original: distribuida en dos plantas, amplia casapuerta - con función de entrada de carruajes -, graneros, bodega y patio, entre otras dependencias.
Su fachada conserva en su portada un bello azulejo con la imagen de la Giralda y en el segundo cuerpo, una hornacina que acoge una cruz de forja y relieve de la Giralda de Sevilla flanqueada por jarrones, contrastando fuertemente con la sobriedad del primer cuerpo de la portada.
En la actualidad se ubican diferentes locales comerciales en el edificio